domingo, 23 de mayo de 2010

Etnias de África Central



Ruanda

LOS HUTUS

Hutu es el nombre dado a uno de los tres grupos étnicos que ocupan Burundi y Ruanda. Los hutu son con mucho el grupo mayoritario. El 90% de los ruandeses y el 85% de los burundeses son hutu. Culturalmente se trata de una división artificial, basada más en la clase social que en la etnicidad, dado que no hay diferencias lingüísticas o culturales entre los hutu y los demás grupos étnicos de la zona, principalmente los tutsi. Históricamente, sin embargo, había diferencias físicas, principalmente en la altura media. Los hutu y los tutsi comparten la misma religión y lenguaje (son católicos y de idioma bantú). Algunos estudiosos señalan también el importante papel que tienen los colonizadores belgas en crear la idea de una raza hutu y una raza tutsi.Los hutu llegaron a la región de los Grandes Lagos de África alrededor del siglo I DC, desplazando a los twa. Los hutu dominaron la zona con una serie de pequeños reinos hasta el siglo XV. Se cree que en esa época entraron los tutsi en la zona desde Etiopía y conquistaron a los hutu. La monarquía tutsi sobrevivió hasta el fin de la era colonial en los años cincuenta, usando y codificando los gobernantes belgas la división étnica para apoyar su dominio. La monarquía tutsi cayó pronto y la zona fue dividida en Ruanda y Burundi en 1962. Los tutsi, no obstante, permanecieron dominantes en Burundi mientras que los hutu ganaron un cierto grado de control en Ruanda.


República del Zaire

LOS LUBA

Los Luba son un pueblo de la familia lingüística bantú, que habita en el sudeste de la República del Zaire. Los Luba están divididos en diversas tribus, que sobrepasan en conjunto el medio millón de individuos.A mediados del s.XVI constituyeron un reino de tipo feudal en cuya corte se desarrolló un arte singularmente refinado, que ha llegado hasta nuestros días: figuras para el culto a los antepasados, máscaras, taburetes sostenidos por cariátides (mujeres arrodilladas), copas, etc. Por lo que respecta a la economía, en la actualidad la región es casi autosuficiente gracias a sus ricas minas de diamantes. Destacar que su economía no ha padecido la hiperinflación desenfrenada del resto del país cosa que ha hecho que esto sea la ventaja principal para esta región. El imperio Luba se caracterizaba por la existencia de una autoridad central, al que se denominaba mulopwe (rey), que copiando de los colonizadores europeos, se revistió de un carácter sagrado . Su religión, tradicionalmente se ha basado en el culto a los antepasados, pero con la llegada de los belgas y la dominación política de éstos, gran parte de la gente Luba se pasó al cristianismo.


Angola, República Democrática del Congo, Zambia

LOS CHOKWE

Los seiscientos mil chokwe constituyen la etnia más numerosa de Angola oriental, pero están también repartidos en Congo y Zambia. En el Siglo XVI los lunda los sometieron e introdujeron la insitución de la jefatura y la sacralidad del poder. En esta época, cuando todavía eran pequeños agricultores y ganaderos, los lunda les enseñaron el arte de la caza, en el que les había sido instruído el jefe luba Tshibinda Ilunga, esposo de la reina de los lunda. Los matrimonios mixtos instauraron la asimilación entre ambas etnias y los jefes chokwe se instalaron en la corte de los lunda.

En los siglos XVII y XVIII continuó el dominio lunda, pero el siglo XIX estuvo marcado por numerosas revueltas. Aunque su cultura era bantú, estas dos etnias diferían en cuanto al sistema de parentesco, lengua y organización política. Los chokwe carecían de un poder centralizado y estaban organizados en grandes jefaturas dirigidas por una aristocracia. Hacia 1850 asistimos a una expansión extraordinaria de los chokwe que, en 1887 consiguieron apoderarse de la capital de los lunda, gravemente debilitados por disensiones internas. De este modo contribuyeron al desmantelamiento del reino. Dominaban perfectamente el arte de la caza, y eran los únicos entre las etnias del Kasai que cazaban elefantes, primero por su carne, luego, a partir de 1858, por el marfil. La tierra era poco fértil, de forma que la caza y la recolección de caucho eran sus principales actividades junto con la miel y la cera que vendían a las etnias costeras. Participaron en el tráfico de esclavos, vendiendo a sus propios criminales y enemigos, además de los prisioneros que hacían durante las incursiones de ataque a sus vecinos.

La llegada de los europeos les obligó a someterse a los belgas y a los portugueses, desplazándose en cada derrota cada vez más hacia el este, en Congo-Kinshasa y el noroeste de Zambia. Por entonces se convirtieron en seminómadas, abandonando paulatinamente las grandes jefaturas y ciertas tradiciones arquitectónicas como los graneros sobre pilotes.

Los chokwe creían en un dios creador Kalunga o Nzambi al que invocaban en sus plegarias aunque no le rendían ningún culto. Los espíritus tutelares y ancestrales mahamba, por el contrario, estaban representados por termiteras, postes tallados o figuras de madera, en santuarios de poblado y de familia. El brujo nganga o comedor de alma invocaba los espíritus maléficos wanga contenido en cuernos y estatuillas. El adivino tahi desempeñaba una función esencial: utilizaba unas planchas de madera o un cesto de adivinación que conteía unos sesenta objetos variados. La función del médico la asumía el mbuki, experto en la ciencia de las plantas. 
La asociación masculina mukanda se encargaba de la iniciación de los muchachos, que comprendía la enseñanza de saberes ancestrales y fiestas de la circuncisión, en las que aparecían una treintena de máscaras simbolizando a los ancestros. El mukanda contribuyó a mantener la tradición de la escultura pese a la presencia de vecinos que carecían de ella. 
El ritual de la pubertad de las niñas se llamaba ukele y consistía en una iniciación sexual y en la aplicación de tatuajes, presentaba a la chica a su prometido.


República Democrática del Congo

Los kuba

Fueron sus vecinos, los luba, quienes les dieron el nombre de kuba o "pueblo del rayo". El rey nwim es elegido en la subtribu de los bushoong o "lanzadores de cuchillos". Unos setenta mil kuba, en regresión respecto a 1938, y las tribus emparentadas kete y cwa vivían en una región de valles bañados por numerosos ríos de dirección sur-norte, bordeados de bosques y colinas cubiertas por la selva.

Los mitos y leyendas kuba contaban la creación y organización del mundo y los hechos heóricos. En la residencia real, hecho excepcional en el África negra, existía un dignatario encargado de conservar las tradiciones y velar por su transmisión. Se han difundido varias hipótesis acerca de su instalación en la región: según parece, los kuba llegaron desde el este y toparon con los europeos a poca distancia del mar, viéndose entonces obligados a escapar para ocupar la zona actual, lo cual explicaría sus vínculos con las tribus de la costa. Durante el Siglo XIX tuvieron que defenderse de varias invasiones luba y su historia está jalonada por revueltas y levantamientos: los bushoong, que habían sometido al conjunto de los kuba, exigían el pago de un tributo. El rey vivía en la capital, en el mushenge o palacio cercado por una empalizada, rodeado de su consejo, komono, y los funcionarios. La población del mushenge no cultivaba la tierra y vivía de los tributos que pagaban los poblados.

Los adivinos, brujos, herreros y fabricantes de máscaras trabajaban los campos a tiempo parcial. Un primer viajero portugués visitó el país kuba antes de la llegada de Wolff, miembro de la expedición Wissmann en 1883. La región, sin embargo, permaneció aislada hasta 1904 pese a que los europeos navegaron por los ríos Kasai y Sankuru y a la instalación de algunos puestos. Los poblados, pequeños y formados por una docena de viviendas, albergaban a un mismo linaje. Las chozas rectangulares se ordenaban en dos filas que dejaban en el centro un espacio para las chozas que contenían los objetos rituales y los hangares donde trabajaban los artesanos. Los jefes de los poblados escogidos entre la casta más antigua residían apartados del poblado.

Las labores de los campos, exceptuando la roturación, era cosa de las mujeres, que cultivaban mandioca, maíz, calabaza, el plátano tropical, piñas y palmeras. El tabaco se reservaba a los hombres. La caza colectiva con red era una actividad de prestigio que fortalecía la cohesión social entre los lugareños; la caza individual se practicaba con trampas. La pesca en el río requería la participación de todo el pueblo para fabricar las canoas. La tierra, propiedad de la colectividad, la repartían los jefes de tierra que residían en la capital. Los terrenos de caza se "prestaban" a cambio de un tributo pagado al jefe. Vansina señaló en 1956 que los kuba habían superado ampliamente la economía de subsistencia gracias sobre todo a la presencia de los esclavos, que representaban el 6% de la población.

La sociedad kuba, estatalizada y muy jerarquizada, estaba marcada por una serie de inclusiones en progresión ascendente: la familia, el linaje, el clan y las asociaciones, que contribuían a conferir un estatuto al individuo. En cuanto a su organización política, el poblado se dividía en dos mitades, dirigida cada una por un jefe. Éste del poblado, asistido por los notables y el consejo, creaba una auténtica unidad política y reinaba sobre una comunidad real. Cinco o seis poblados formaban un cantón que, reagrupado con otros tres o cuatro más, constituían una tierra; las nueve tierras conformaban la jefatura bushoong que en 1956 contaba con 125 poblados, con un total de alrededor de doscientos diez poblados para el conjunto del reino. El rey, a la vez jefe del reino y de la jefatura bushoong, era de origen divino, estaba dotado de poderes sobrenaturales otorgados por sus antepasados o por la brujería, aseguraba la fecundidad de las coshechas, el éxito en la caza, la lluvia y el nacimiento de niños. Con este fin, el doble del rey asistía a los partos en la forma de una estatua, el ndop. La realeza protegía de la anarquía aunque la la cohesión era únicamente formal, ya que las instituciones formales eran débiles. Cada jefatura, representada por un delegado ante el rey, pagaba un tributo anual pero se mantenía independiente en el plano interior. Dos jefaturas podían estar en guerra entre sí sin que interviniera el rey salvo que se solicitara su arbitraje. Los cargos no eran hereditarios, sino que se redistribuían constantemente entre otros linajes. El mismo rey era elegido dentro del linaje pero su hijo no heredaba su dignidad. La entronización duraba un año: tenía que romper con su linaje y, para probar su estatuto, cometer incesto; luego, el día de la coronación, su madre se casaba con varios hombres para evitar que ninguno de ellos pudiese reclamar privilegios en nombre de su hijo.

Se ha podido constatar, además, una especialización a nivel del sexo, oficios y regiones: los tejedores, herreros, cazadores y constructores de canoas, los cantantes, danzarines y músicos se organizaban en corporaciones y cada uno conservaba su especialidad. En general, sólo había uno o dos escultores por poblado y su trabajo se consideraba muy importante. Sólo los más hábiles practicaban dicha actividad. Podemos encontrar también especialización a nivel de subtribus: los pyaang eran los herreros del reino; los kele y los ngeende, pescadores; los kete proporcionaban la sal, y los batwa eran los cazadores. Esta especialización permitía suponer un sentido del comercio muy desarrollado tanto en el interior como en el exterior del reino. Los kuba importan objetos de barro y marfil a cambio de cobre y de hierro. Los lulua suministraban esclavos, los pende introdujeron el tabaco,la rafia y la mandioca. Desde el siglo XIX los kuba estuvieron en contacto con los tshokwe, que subían paulatinamente hacia el norte. Había intercambios a tres niveles: esclavos comprados a los kuba contra tejidos europeos, que eran revendidos a los kuba a cambio de marfil.



República Democrática del Congo

LOS SUKU

Instalados en el sudoeste de Zaire, los suku cuentan con ochenta mil individuos aproximadamente. Siempre se les asocia a la tribu de los Yaka, debido a su similitud en un gran número de rasgos. Sus instituciones, organización política y tradiciones culturales son casi idénticas. Tan sólo el estilo de sus estatuas permite diferenciarlos.

El jefe de linaje tenía poder de vida y muerte sobre sus miembros. Se hacía cargo del culto de los antepasados y era la autoridad judicial. Debía tener numerosa descendencia. El linaje quedaba sometido a la autoridad del linaje fundador, que, a su vez, pagaba un tributo anual al jefe de la región. Éste rendía cuentas al rey, autoridad suprema a la que asistía un consejo consultivo de hombres con título.

Al margen de esta jeraquía, el señor de la tierra desempeñaba un papel importante en los ritos que acompañaban la caza, actividad esencial de los hombres, y que podía ser individual, con arco o carabina, o colectiva, ayudados por perros y trampas. Al igual que entre sus vecinos los beenmbe o los bwende, para asegurarse que conseguirían la caza, los cazadores realizaban un ritual preciso bajo la dirección del señor de la tierra.

Los Suku (Y los Yaka) practicaban una iniciación, el n-khanda. Se construía una cabaña especial en el bosque para acoger a los postulantes durante su retiro, que terminaba con la circuncisión, lo que era motivo de grandes fiestas con máscaras, danzas y cantos. Los jóvenes iniciados pertenecerían entonces al grupo paterno. 
El n-khanda se organizaba cada vez que había un número suficiente de muchachos entre los diez y quince años.

En esta tribu, el adivino ngoombu ejercía su oficio con un tambor de adivinación.
La escultura de madera incluye un arte de corte vinculado a la jerarquía social: insignias de jefes, cinturones, pulseras, azuelas, pipas, láminas de toma de palabra, reposanucas (Exigidos para los complicados peinados que rara vez se rehacían), así como pendientes y espantamoscas que son los atributos del jefe de la guerra. Los sortilegios de caza consistían en estatuillas o simples maderos, a los que se honraba en una choza especial o un recinto sagrado. Los instrumentos musicales incluían silbatos para los perros, en los que se esculpía una figurilla y los tambores con rendija adornados con un busto o cuerpo humano en uno de sus extremos; los tambores servían de asiento cuando estaban levantados.

Como en la mayoría de las etnias de Zaire, las estatuillas con un contenido de ingredientes mágicos, los biteki, tenían funciones beneficiosas o perniciosas. Las medicinas se introducían en el abdomen cerrado con un tapón de resina o contenidas en saquitos pegados al cuello o la cintura. El khosi, cuya dimensión varía entre los 30 y 76 cm, constaba de un cuerpo con dos caras y miembros desdoblados, o por dos estatuillas que se tocan por la espalda. La cara va a medias pintada a medias de rojo y blanco, mientras que el cuerpo está adornado con puntos rojos y blancos, y las caderas cubiertas por una rafia o de algodón. La estatua se conserva en una choza situada en el recinto de la casa de la jefatura.

Los suku dle norte tienen estatuas poco frecuentes, las mulomba, o figuras con la mano alargada solicitando un don. Son propiedad de los jefes de la región. Todas las esculturas llevan el peinado típico de los jefes de tierra y linaje.

Al contrario de la estatutaria, interesante en el plano estético, las máscaras son populares y pobres. Responden a diversas funciones: algunas sirven de protección contra los maleficios y otras aseguran la fertilidad del futuro joven iniciado. Su papel consiste en asustar a los asistentes, curar las enfermedades o lanzar maleficios. Las máscaras-sortilegio del especialista de la iniciación no danzan. Su aparición debe suscitar el terror, sobre todo el kakuungu de los suku, de mejillas hinchadas, rasgos macizos y barbilla prominente. Es la máscara más grande que se conoce en el África negra. Dividida verticalmente, con un lado rojo y otro blanco, se sostiene con una empuñadura situada bajo la barbilla.

Los suku utilizan máscaras-casco hemba. Talladas en un cilindro de madera, el peinado suele estar coronado por un personaje o un animal en altorrelieve. En el norte la máscara se pinta de blanco y se marca con lineas azules, mientras que al sur es roja. Estas máscaras serían la imagen de la comunidad de los antiguos difuntos, sobre todo de los jefes de la línea materna. Favorecen el éxito en la caza, sanan y castigan a los criminales.l norte la máscara se pinta de blanco y se marca con lineas azules, mientras que al sur es roja. Estas máscaras serían la imagen de la comunidad de los antiguos difuntos, sobre todo de los jefes de la línea materna. Favorecen el éxito en la caza, sanan y castigan a los criminales.

martes, 18 de mayo de 2010

Factores que incidieron en el comercio de Esclavos en África

La búsqueda de la riqueza es el derecho de todo grupo de personas. Sin embargo, en los tiempos antiguos, las leyes globales para garantizar los derechos de otras personas que no ostentan ni privado era o no rigurosas o inexistentes. Por lo tanto, en el África precolonial, para los militares, judiciales, y las elites comerciales de los Estados africanos, por lo tanto, el trabajo esclavo proporcionado una considerable proporción de los excedentes en la que se basó para su apoyo, así como entre los productos y los superávit en consonancia con estatus de élite. En el mismo sentido, los mismos países europeos que mayor puntuación cuando se trata de cuestiones sobre los derechos humanos y el respeto de la humanidad estaban ocupados estrangulamiento entre sí en sus diversos intentos de caza de las colonias en África y Asia (a la edad del imperialismo y la carrera por África ).

Las razones por qué los europeos buscaban con tanto fervor colonias en África son numerosos entre los círculos académicos, pero ninguno de ellos sugieren la crueldad, la codicia o el mal de corazón para ellos. Por ejemplo Lenin (quien llegaría a ser la figura más destructiva en Rusia) propone que en vista de la evolución capitalista, el capitalismo ha llegado a una etapa donde el control de capitales se acercaba a concentrarse cada vez más en pocas manos, que dejó el poder adquisitivo demasiado poco en el mercado interno para los productos que se pudieran producir. De ahí que crea una situación de sub-consumo. Por consiguiente, era la necesidad de exportar a las regiones menos desarrolladas que podrían contener valiosas materias primas.

La abundancia de estas materias primas en las regiones subdesarrolladas podría haber llamado la atención de estos europeos. Y viendo que los africanos no eran, obviamente, la aplicación de estas materias primas vitales en servicio como lo harían, por supuesto (cada persona racional hubiera hecho lo mismo), se propuso poner en marcha mecanismos para dominar estos recursos. Así que con una mano superior en armamento ofensivo, y no las leyes internacionales para proteger contra los intentos de subyugar a los africanos, se asentaron y dominaron todas las facetas de los países de África.

Otra explicación de las fronteras en el prestigio y el honor que trajo los gobiernos europeos, y la posibilidad de ganar los votantes cuando los territorios se ganaron. Una vez más, no hay que olvidar que no hay leyes internacionales para la solución y la dominación ilegal, ni hay leyes globales que detallen las normas para entablar combate el comercio.

Luego está la razón muy odiado, y es que los europeos vieron la mayor parte de las prácticas en África y algunas partes de Asia como incivilizados, de ahí que se encargaron de embarcarse en una misión de civilizar el mundo. Esta proclamación por los europeos, en parte racial y moral, en parte, (pero, tradicionalmente, una característica principal en la concepción de una nueva civilización) puede no ser el mejor de los recursos a lo que ellos vieron como algunas de las prácticas moralmente inadecuado de algunas personas en el mundo , sino una justificación ligera viene para esta misión de civilizar si tenemos en cuenta los sacrificios humanos realizados en el siglo XIX por algunos jefes de Ghana (por ejemplo) como una costumbre tradicional.

Pero lo que alguna vez la razón, la ambición o el etnocentrismo, el mundo ha llegado a la etapa en que una mirada al pasado con dolor no sería necesario.

Si el pensamiento determina la acción de las personas, entonces por extrapolación las ideologías dominantes en un período de tiempo determinar los fenómenos del mundo. Los europeos las mujeres quemadas con comportamientos extraños en la hoguera en la era de la caza de brujas. Un fenómeno que se produjo debido a la idea de la superstición.

Esta práctica, que surgió de la creencia en lo sobrenatural ya no existe en estos países. Las personas que llevaron a cabo actos como este y los de naturaleza similar han adquirido la madurez en el conocimiento. Sin embargo, en África, y tal vez incluso aquí en Ghana, aún tenemos que iluminar a las personas involucradas en humanos violaciónes derecha como trokosis y la mutilación genital femenina. Naturalmente, estas prácticas tosco terminará, y al igual que la esclavitud y el colonialismo, sólo se encuentran en los libros de historia en el futuro, ya que el mundo siempre encuentra una manera de deshacerse de las personas y las prácticas que ponen en peligro su existencia.

Pre-África colonial facilitó la conquista europea. Estas disensiones internas y los conflictos, dijo haber sido provocado por las barreras artificiales de los colonizadores, alienando así hasta ahora unificada y organizada pueblo africano existía incluso en el África precolonial.

La historia da fe de que los Estados de África precolonial estuvieron plagados de disonancia interna porque no había aceptado los métodos de transferencia de poder político. El imperio de Malí se dice que se han derrumbado como consecuencia de la inexistencia de mecanismos adecuados para controlar el trono.Además, como es el caso de todos los poderes en expansión, los hausa ciudades-estado y el Kanem-Bornu estaban en guerra constante. Con el tiempo, debilita sus defensas contra mercenarios europeos.

En el siglo XV cuando las potencias europeas llegaron al comercio de bienes y personas, que encontraron en las instituciones de los Estados africanos ya existentes de que los gobernantes nativos mismos estaban dispuestos a operar para satisfacer la demanda de esclavos para la exportación.

Entre 1450 y 1810, los gobernantes africanos suministrado la mayor parte de las 7,6 millones de esclavos exportados a las colonias europeas, así como un número desconocido enviado por comerciantes musulmanes a través del Sahara y el Océano Índico. Pero de alguna manera, la contribución musulmana a la esclavitud de África no ha ganado importancia en las mentes de la mayoría de los africanos, ni tampoco ver el efecto igualmente devastador que tuvo en África cuando se echa un vistazo hacia el pasado de África.

Esta exposición no sugiere de ninguna manera que debido a que el comercio de esclavos se produjo hace mucho tiempo sus consecuencias hay que olvidar, ni es restar importancia a los legados del colonialismo, que ha alterado nuestra vida social, política, económica y cultural de maquillaje. Existe una relación significativa entre algunas de las razones de la tardanza de África para lograr el crecimiento socioeconómico en la medida esperada en virtud de su vasta reserva de recursos naturales, y su dominación colonial y la esclavitud pasado.

El bloque de las razones del subdesarrollo de África (baja productividad, el estancamiento, la pobreza) y las enfermedades, en la actualidad, no puede y no debe ser culpado más en nuestra esclavitud y el pasado colonial.

martes, 11 de mayo de 2010

BIENVENIDA

hola a todos, besos, bye XOXO